Fotografía
Germán Cabo
Gemma Aparicio (Obra)
Entre bancales, buscando captar las vistas hacia el valle sobre los olivos existentes en la parcela, se ubica la vivienda. Un sencillo plano horizontal le sirve de cobijo. Varios planos verticales de piedra configuran el espacio y dotan de carácter al conjunto.
La losa de cubierta, sometida casi exclusivamente a cargas permanentes explora los límites de la esbeltez en la zona sobre el salón – comedor, provocando la necesidad de una ejecución mediante contraflecha para compensar la deformación plástica diferida. La losa, de 26cm cubre casi 11m, sin recurrir a estrategias tecnológicamente más avanzadas como el postesado. Los soportes, apantallados, soportan un vano central de 5m, que genera voladizos de 3m en ambos lados, resultando una sección no compensada de forma eficaz, pero necesaria por cuestiones arquitectónicas.
En el nivel inferior, la piscina y un espacio polivalente terminan de configurar la plataforma que la vivienda extiende en la parte posterior de la parcela, en la búsqueda de las mejores vistas y orientación.