Colaboradores
Javier Estevan
Fotografía
Carlos Gallardo
Gemma Aparicio
Sobre la copa de los árboles, volando desde una parcela de extremada pendiente, la vivienda avanza hacia las vistas generando una bandeja desde la que disfrutar del paisaje. Una serie de plataformas configuran el acceso escalonado desde la vía superior, y terminan fundiéndose con los propios planos volados de la vivienda.
Las losas y muros de hormigón armado macizo, aprovechando la rigidez proporcionada por el plegado de los planos estructurales, resuelven una luz de 15m con un voladizo de casi 6m. Los cantos de las losas, entre 24 y 39cm, se adaptan a las exigencias estructurales.
La complejidad de la parcela, consecuencia de la elevada pendiente, conduce a un ejercicio estructural cuidadoso en la contención, el escalonamiento, y la adaptación tanto al proyecto arquitectónico, como a las condiciones temporales de la construcción.